Me llama un cliente ayer para pedirme unas modificaciones en un portal que le programamos el año pasado. El portal tiene una parte importante de programación. Tiene un catálogo de productos que una serie de usuarios van administrando, añadiendo información, precios, disponibilidad, etc.
La modificación que quiere afecta a buena parte de todo. Quiere que los textos que no superen un determinado número de caracteres, no entren, y además quiere que ninguno de los usuarios pueda poner mas de una serie de palabras a la semana, para no monopolizar la información.
Le paso un presupuesto con unas 10 horas de trabajo (he tirado un poco por lo bajo, teniendo en cuenta que hace mas de un año que no se toca, y que la persona que lo hizo no está aqui), pero lo considero un buen cliente.
Me dice:
-¿Pero me vas a cobrar esas 10 horas de trabajo?. Ni que fueras un fontanero.
Respuesta
-Si, soy un fontanero de su portal. En realidad soy tan profesional como un buen fontanero, y no trabajo gratis, al igual que no lo hace su fontanero, su mecánico, y su electricista. Si quiere las modificaciones, eso es lo que cuestan. Es totalmente libre de no hacerlo. Pero, por favor, no insulte a los profesionales, entre otras cosas, usted (creo) que también lo es.
No pondré lo que se me ha ocurrido contestarle y me he callado por respeto.
PD: He cambiado algún detalle del trabajo a realizar para no dar pistas…
Le puedes pasar una factura como la de la anécdota que contaban:
-Alguien llamó a un informático para que le «arreglara» el ordenador que se le había quedado colgado.
-El técnico observa el PC y decide hacer un reset. Consigue ponerlo en funcionamiento y ¡Ya está!.
-El cliente le pregunta el importe de su «trabajo» y le responde que 100€.
-Asombrado le dice que le parece caro pero que le haga factura detallada del importe de la reparación.
Al día siguiente vuelve con la factura con el desglose siguiente:
– Apretar el botón de Reset, 0,50 €
– Saber qué botón apretar 99,50 €.
Puedes mandarle este chiste o directamente a la M…
Como sabes, porque me has visto, mi trabajo es mucho más «manual», pero en Zaragoza sólo hay tres que lo hagamos, así que el precio del trabajo lo pongo según el interés que tengo en hacerlo (o de la prepotencia del cliente).
Me han llegado a decir, «pues por ese precio me lo hago yo», y llamar al cabo de una semana para hacerles el trabajo. En ese momento subo el precio y les doy plazo para quince días mínimo.
Es extraño, el fontanero va, cobra desplazamiento, mano de obra y materiales y no pasa nada. Llevan el coche al taller, les cobran 75 euros por hora de mano de obra y no pasa nada.
Pero en lo que no entienden (que es todo, pero no vamos a entrar ahí) tienen que regatear y quejarse.
Me apunto la frase, «Ni que fueras un fontanero». Qué bueno…
Pues menos mal el tipo ese no es cliente mío porque por la descripción que hace del trabajo, yo le hubiera cotizado 16 horas (2 días) mínimo.