Crisis, crisis, crisis, parece que no se habla de otra cosa.
Hoy he vivido una experiencia relacionada, y me apetece contarla:
Un cliente al que le habíamos hecho una instalación de cámaras y de red wifi, está pasando un serio problema económico. Me debía varias facturas y después de vanos intentos de cobrarlas y de ponerme en contacto con el responsable, esta mañana he recibido una llamada diciéndome que no iba a cobrar por culpa de esos problemas que estaban atravesando. Me dejaban la puerta abierta a que tomase las medidas oportunas al respecto. Y tras meditarlo, he optado por llevarme parte del material instalado, cubriéndome (en parte) de lo invertido. La mano de obra era imposible de «cobrármela» asi que he dejado aproximadamente el 30% del material.
Lo que ha ocurrido al llegar por la tarde al cliente es que nos hemos presentado junto con la empresa que les llevaba la telefonía, que estaban peor que yo, puesto que no habían cobrado un céntimo. Ellos llevaban intención de llevarse la centralita y los teléfonos. Tengo que decir a todo esto ,que es un establecimiento público que vive de cara a la calle con clientes discontínuos. Si yo me llevaba los accesos Wifi y ellos la centralita, se quedaban sin teléfono, sin internet, sin posibilidad de cobrar a los clientes con tarjetas, sin opción de llamar o recibir llamadas…. y además parte de los empleados no sabían nada.
Ha sido muy desagradable ver las caras de la gente (alguno incluso a punto de llorar), mientras procedíamos a desmontar parte de lo instalado. Sinceramente no me he atrevido a dejarles sin internet, y creo que la compañía telefónica les va a dejar una línea para que puedan operar, pero ver las caras de la gente ha hecho que me de cuenta que por mucha crisis que nos digan, por muchos casos que veamos en la tele de empresas que cierran, o que regulan sus empleados, detrás de todo eso hay personas que están sufriendo en sus propias carnes la «puta crisis» y que les ha llegado sin olerlo.
A todo esto, debo decir que los responsables de la empresa no han dado la cara en ningún momento, y la única manera de hablar con ellos (y con muchas dificultades), ha sido de manera telefónica.
No se que pasará en las próximas semanas, creo que no pintan bien las cosas para que remonten y yo me tendré que comer el material, y perder dinero.
A ver si acaba el año, y se lleva la crisis con él, se que es imposible, pero es un deseo.